En el amanecer de un día que prometía ser
despejado, yo, como otras veces, salté de la cama, me vestí y salí a correr por
la playa. El cielo, allá por el este, iba tomando color rojizo.
A veces, cuando siento que me falta la respiración,
me viene a la cabeza la idea de que estoy maltratando mi cuerpo. A esas horas y
sin haber desayunado, es difícil conservar una conciencia clara.
El ronroneo de las olas mordisqueando la arena, el
aire cambiando por segundos, el fragor de la corriente, blanca y espumosa,
arrastrándolo todo… me van anunciando que un día empieza a nacer.
Cuando llego al final del paseo, dónde ya sólo hay
playa, siempre me detengo y miro la hilera de pálidas casas brumosas que he
dejado atrás. Entonces el sudor se seca y la brisa fresca me acaricia.
Así estaba esa mañana, intentando recuperar mi
consciencia, cuando oí una voz a mis espaldas. Me sobresalté y, cómo en la
fábula del perro que deja caer el hueso al río, dejé caer el iPod que llevaba
en ese momento en la mano.
Cuando me volví, vi una mujer que sonreía. También
venía corriendo. Ojos grandes, pelo corto, y a pesar de que parecía estar en la
treintena, la cara llena de granos.
La reconocí y le devolví la sonrisa sin esfuerzo.
Con toda naturalidad recogió mi iPod y me lo ofreció mientras empezaba una
conversación que, por supuesto, derivó en su acné ya que era paciente mía…
……….
Siempre hemos oído que el acné es cosa de la edad y
que se quita con el tiempo. Es cierto, pero aunque en muchas pacientes el acne
remite espontáneamente. En aquellas mujeres en las que no lo hace o tienen
signos de hiperandrogenismo (aumento de vello facial, ciclos irregulares, etc),
la terapia hormonal es una opción, y puede utilizarse también aunque no existan
signos analíticos o cutáneos de aumento de andrógenos.
Los dermatólogos usamos, desde hace años,
anticonceptivos en el tratamiento del acne, especialmente para el acné
resistente que aparece en mujeres adultas. Aunque no como primera elección. Los
tenemos más como tratamiento de segunda línea, en combinación con otros
fármacos. También usamos medicamentos como la espironolactona que, entre otras,
tiene acción antiandrogénica.
Los andrógenos juegan un papel importante en la
formación de las lesiones de acné, aumentando, la producción de sebo en las
glándulas y la cantidad de queratina, lo que da lugar a las espinillas. Al
romperse estas aparecerán los típicos granos.
La progesterona y los estrógenos actúan bloqueando
la acción de los andrógenos, con lo que hacen, entre otras cosas, que baje la
producción de sebo. Así que, usamos los anticonceptivos orales que contienen un
estrógeno y un progestágeno con el fin de disminuir la producción de andrógenos
en los ovarios. Por otro lado, los anticonceptivos también aumenta la cantidad
de proteína transportadora de hormonas sexuales en sangre (SHBG), lo que hace
que circule menos cantidad de testosterona libre disminuyendo su acción sobre
la piel.
Algunos de los nuevos anticonceptivos orales
contienen drospirenona, un derivado de la espironolactona. Estos tienen actividad
antiandrogénica parcial, y sirven para regular los ciclos menstruales, haciendo
además que sean menos dolorosos. También disminuyen la producción de sebo (por
lo que mejoran el acné) y actúan deteniendo el crecimiento del vello no
deseado.
Se han aprobado cuatro tipos diferentes de
anticonceptivos para este uso, y esta es su composición:
Etinilestradiol 35μg/Acetato de ciproterona 2 mg (por ej., Diane 35)
Etinilestradiol 30μg/Drospirenona 3mg (por ej, Yazmin, Dretine)
Etinilestradiol 20μg/Drospirenona 3mg (por ej, Yasminelle, Yaz
Dretinelle)
Etinilestradiol 20μg/Levonorgestrel 100μg (por ej, Loette
Anillo
vaginal con Etinilestradiol 2,7mg/Etonorgestrel 11,7mg
¿En qué casos y cómo usamos terapia hormonal en el
acné?
Las candidatas son mujeres en las que el acné está
claramente relacionado con cambios hormonales. Se usa también en el acné de
inicio tardío (edad adulta), cuando los brotes coinciden con la regla, en las
que no responden a otros tratamientos y cuando necesitamos evitar el embarazo
por estar usando tratamientos con retinoides.
El acné relacionado con cambios hormonales, suele
tener más lesiones en la parte inferior de la cara (barbilla, mentón) y en el
cuello. Los brotes son premenstruales con o sin ciclos irregulares y estas
pacientes presentan muchas veces, aumento de vello (hirsutismo).
Recetar un anticonceptivo en mujeres mayores de veinte
años, parece menos complicado que hacerlo en adolescentes, por las
implicaciones que supone en estas el uso de la píldora. Por eso, otra opción es
usar espironolactona.
El tratamiento, lo mantenemos entre 12 a 24 ciclos
y se va retirando progresivamente, salvo que la paciente desee seguir usándolo
como método anticonceptivo.
Como las pacientes con ciclos menstruales
irregulares, con o sin hirsutismo, pueden tener trastornos endocrinos (síndrome
de ovario poliquístico o hiperplasia suprarrenal congénita), se pueden
beneficiar también de terapias hormonales.
Si una paciente ha estado en tratamiento con
isotretinoína muchas veces y el acné sigue reapareciendo, puede indicar la
existencia de un trastorno hormonal subyacente.
¿Pedimos algún análisis?
Niveles de testosterona total y libre, sulfato de dehidroepiandrosterona
(DHEAS), el índice hormona luteinizante / hormona folículo estimulante (LH /
FSH). Y la 17hidroxiprogesterona en caso de estar alterados los anteriores para
confirmar la sospecha de hiperplasia suprarrenal de inicio en el adulto.
¿Usamos los anticonceptivos solos o combinados?
Se pueden usar solos, pero en combinación con otros tratamientos
son más eficaces.
Los dermatólogos utilizamos espironolactona junto
con los anticonceptivos orales para reducir al mínimo los efectos secundarios
de estos, como las irregularidades menstruales o el aumento de sensibilidad en
las mamas.
Otra ventaja de combinar estas terapias hormonales
es que tratamos el acné utilizando dos mecanismos de acción, lo que “duplica”
el efecto. Si el acné no se controla adecuadamente con los anticonceptivos
orales, podemos añadir espironolactona, ya que las píldoras anticonceptivas
pueden tardar de dos a tres meses en hacer efecto, y con la espironolactona, la
mayoría de los pacientes notan una disminución de lesiones de acné y grasa en
un par de semanas.
No son candidatos para tratamiento con
anticonceptivos orales las pacientes con los siguientes factores de riesgo:
obesidad, presión arterial alta, derrame cerebral, trombosis venosa profunda
(TVP), migrañas, o antecedentes familiares de cáncer de mama o endometrio.
Y esto es lo que iba escuchando esa mañana en mi iPod.
Hola! que buen articulo, lo felicito :) pero tengo una duda. Fue mi ginecóloga quien me recetó anticonceptivas, tanto para planificar como para mejorar mi acné adulto (27 años) y además me recetó espironolactona. No sufro de ovarios polifacéticos, ni exceso de vello, solo un acné hormonal desde hace varios años. Leyendo en internet noto que la espironolactona tiene muchos efectos adversos y no se si valga la pena arriesgarse cuando he visto en amigas que con solo anticonceptivas mejoran notablemente su acné. usted que opina?? ojalá pudiera responderme
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